La pregunta que cruza la pieza teatral “La mentira” es si realmente los seres humanos podemos decirnos la verdad o siempre la salida más cómoda es mentirse mutuamente, sobre todo, en las relaciones de pareja.
En esta comedia, escrita por el dramaturgo francés Florian Zeller, se mantiene la tensión en forma permanente. Hay un juego en un límite difuso donde no se sabe cuál es la verdad y cuál es la mentira.
El humor juega un punto esencial para dar alivio al público ante el espejo de lo que es la sociedad y las relaciones de pareja.
La dirección de Héctor Morales lleva al elenco, con una mano creativa, por un camino de secretos y engaños donde es fácil perderse, pero al final se resuelve.
Sobre el escenario actúan María José Bello, César Sepúlveda, Javiera Díaz de Valdés, Giordano Rossi, quienes logran mantener la atención del público, que ríe constantemente en una suerte de identificación y complicidad.
Destacan la madurez actoral de María José Bello y César Sepúlveda, y la espontaneidad de Javiera Díaz de Valdés y Giordano Rossi. Todos con plausible impostación de voz.
La escenografía, con un buen lenguaje, es apropiada para dar movimiento a los personajes y dar jovialidad a la obra.
No es necesario, para ver esta obra, conocer la trilogía del dramaturgo: “El padre”, “La madre”, “El hijo”. Se recomienda ir a sorprenderse y ver en la trama estrategias propias del ser humano.
Con una excelente crítica internacional la obra ha sido estrenada en diferentes partes del mundo. En Chile se representa en el Teatro Zoco hasta el 27 de abril.
Más información en https://teatrozoco.cl/evento/la-mentira/
Ficha técnica
Autor: Florian Zeller
Versión de: Fernando Masllorens y Federico González del Pino
Director: Héctor Morales
Elenco: María José Bello, César Sepúlveda, Javiera Díaz de Valdés, Giordano Rossi
Diseño de escenografía: Rocío Hernández
Asistente de diseño de escenografía: Nicolás Jofré
Diseño de iluminación: Andrés Poirot
Diseño de vestuario: Natalia Schwarzenberg
Composición musical y diseño sonoro: Yair Gómez
Maquillaje y peinados: Margarita Nilo
Fotos: Daniel Corvillón